miércoles, 3 de abril de 2013

La Sonrisa de Donosti #MCM2013

El ritmo por kilómetro, el paso por Media, las pulsaciones, el tiempo final...

Más allá del dato numérico, lo que quiero experimentar y recuperar en Milán es esto:



No me refiero a no sufrir. Eso, lo tengo claro, llegará y sucederá.
Forma parte de un Maratón y como tal, estoy preparado física y psicológicamente.

Hablo de una sensación, de congraciarme en los metros finales y en la llegada con el trabajo realizado.

En Rotterdam llegué tan castigado que no sonreí, solo albergué muecas de dolor por la travesía de más de 10 kilómetros por mi desierto particular holandés.

En Valencia, tan decepcionado por el bajón final que no disfruté de la llegada, casi me lamentaba por esprintar tanto (después de tenerlo) apenas rascando unos segundos a mi MMP.



Más allá de una marca, que sea la que sea, no lo es ni lo será TODO.
Están los entrenamientos, la gente, el esfuerzo, los problemas salvados, el tiempo invertido, las ilusiones, las recompensas a medio camino, tantas y tantas cosas y al final...

Una SENSACIÓN que no experimento desde mi debut, en Donosti 2011.

La de ser FELIZ con la batalla planteada, con el trabajo realizado en su conjunto.
La de llegar de esta forma.

Apenas 3 días. Domenica, ¡maratona!

2 comentarios:

HÉCTOR BAEZA SÁNCHEZ dijo...

¡Mucha suerte Darío!.

Darío Collado dijo...

Gracias! No salió pero ya habrá más oportunidades!