Esta es una crónica de lo que NO ocurrió el día 2 de diciembre en Valencia.
El 28 de octubre se paró la preparación. En la semana 8/13 para el "día D".
Tan solo una semana después de anotarme "una buena Media" para ser octubre (1.29.13 en Fuenlabrada)
Fue en un rodaje con Edu y Rafa "drinkingrunners". Debía hacer 20 y en el 16 noté que el gemelo derecho se cargaba más de la cuenta. Por precaución paré, y menos mal, volví andando a casa.
El caso es que desde ese día, mucho reposo, mucho fisio, intentarlo cada varios días cada una de las semanas hasta el domingo anterior a Valencia, donde definitivamente di por perdida la maratón. Durante semanas tiré de ilusión y proyección en "efecto Zatopek" por si no fuera tanto como luego fue y por si de forma milagrosa llegara justo, pero llegara. Cosa que no ocurrió.
Contractura en el soleo primero, después más bien distensión. Complicado recuperar tal daño en apenas 4-5 semanas sin hacer milagros ni hacerse una avería mayor. Así que tiré de sentido común y paré la aventura hacia el décimo maratón. Los primeros días, lo llevé mal, para que nos vamos a engañar, pero al paso de los días fui dosificando la emoción y entendiendo que esta vez había tocado así y que poco más podía hacer que todo el esfuerzo derramado por intentarlo.
Me quedé con las ganas de completar mi segunda maratón con mi gran amigo Ric, que se calzó un gran maratón en 3.49 con preparación complicada y sin pestañear, y con los drinkingrunners con los que preparé esas 8 semanas en las que "no me enteré" que estaba preparando un maratón.
¿Las causas del parón?
A toro pasado, veo varias, aunque al principio no les enlazara. Es innegable que el factor "mala suerte" puede aparecer en una preparación pero también el de las "malas decisiones". A la sazón
identifico:
- Pegarme una tarde de saltos con el niño en uno de esos sitios de colchonetas tan chulos que ahora se llevan. Lo di todo durante una hora de saltos imposibles y el día siguiente me metí una media maratón a 4.14, ¿suena un poco mal no? Ahora lo veo como un error de principiante. En ese momento fue el típico plan chulo con el niño que no pensé llegara a mayores...
- Meterme un Media en 1.29 sin muchos entrenos para ese ritmo ni un peso adecuado.
- Cambiar de zapatillas en la misma semana.
En fin, lección aprendida. Sigo en fase de recuperación. Pasada la "quimera" de intentar correr el Maratón de Valencia, pasé al plan "que se recupere el soleo cuando quiera". Ya sin prisa, con más reposo, contrastes frío-calor, estiramientos, más fisio, etc.
Mañana volveré a trotar 30' y a ver qué tal.
El plan es recuperarlo en lo que queda de año, base en enero y empezar a preparar Ginebra en febrero. Tiempo, parece que tengo, solo espero que me acompañe el factor "buena suerte" que no me acompañó en esta preparación.
Seguimos!
El 28 de octubre se paró la preparación. En la semana 8/13 para el "día D".
Tan solo una semana después de anotarme "una buena Media" para ser octubre (1.29.13 en Fuenlabrada)
Fue en un rodaje con Edu y Rafa "drinkingrunners". Debía hacer 20 y en el 16 noté que el gemelo derecho se cargaba más de la cuenta. Por precaución paré, y menos mal, volví andando a casa.
El caso es que desde ese día, mucho reposo, mucho fisio, intentarlo cada varios días cada una de las semanas hasta el domingo anterior a Valencia, donde definitivamente di por perdida la maratón. Durante semanas tiré de ilusión y proyección en "efecto Zatopek" por si no fuera tanto como luego fue y por si de forma milagrosa llegara justo, pero llegara. Cosa que no ocurrió.
Contractura en el soleo primero, después más bien distensión. Complicado recuperar tal daño en apenas 4-5 semanas sin hacer milagros ni hacerse una avería mayor. Así que tiré de sentido común y paré la aventura hacia el décimo maratón. Los primeros días, lo llevé mal, para que nos vamos a engañar, pero al paso de los días fui dosificando la emoción y entendiendo que esta vez había tocado así y que poco más podía hacer que todo el esfuerzo derramado por intentarlo.
Me quedé con las ganas de completar mi segunda maratón con mi gran amigo Ric, que se calzó un gran maratón en 3.49 con preparación complicada y sin pestañear, y con los drinkingrunners con los que preparé esas 8 semanas en las que "no me enteré" que estaba preparando un maratón.
¿Las causas del parón?
A toro pasado, veo varias, aunque al principio no les enlazara. Es innegable que el factor "mala suerte" puede aparecer en una preparación pero también el de las "malas decisiones". A la sazón
identifico:
- Pegarme una tarde de saltos con el niño en uno de esos sitios de colchonetas tan chulos que ahora se llevan. Lo di todo durante una hora de saltos imposibles y el día siguiente me metí una media maratón a 4.14, ¿suena un poco mal no? Ahora lo veo como un error de principiante. En ese momento fue el típico plan chulo con el niño que no pensé llegara a mayores...
- Meterme un Media en 1.29 sin muchos entrenos para ese ritmo ni un peso adecuado.
- Cambiar de zapatillas en la misma semana.
En fin, lección aprendida. Sigo en fase de recuperación. Pasada la "quimera" de intentar correr el Maratón de Valencia, pasé al plan "que se recupere el soleo cuando quiera". Ya sin prisa, con más reposo, contrastes frío-calor, estiramientos, más fisio, etc.
Mañana volveré a trotar 30' y a ver qué tal.
El plan es recuperarlo en lo que queda de año, base en enero y empezar a preparar Ginebra en febrero. Tiempo, parece que tengo, solo espero que me acompañe el factor "buena suerte" que no me acompañó en esta preparación.
Seguimos!