martes, 23 de diciembre de 2008

Tener un rival te hace crecer

Cuando comencé a correr en 2001 tuve la "desgracia" de empezar sólo. Bueno, tampoco vamos a dramatizar, empecé como todo el mundo, saliendo a correr un día, aguantando las agujetas otro, encadenando semanas trotonas, asimilando kilómetros y participando en las primeras carreras populares que por aquel entonces adiviné: San Claudio, CSIC, Oásis, Canillejas, Akiles, San Silvestre Vallecana... sin rumbo, sólo disfrutando.

Llegó un punto de estancamiento, dónde las marcas no se movian (en torno a 38' en diezmil) y de continuar trotando en soledad con un plan de elatleta.com y pocos objetivos más allá de las carreras que iba conociendo... nada trascedente, nada que me moviera por dentro salvo tener la esperanza de mejorar cuando el cuerpo se decidiera.

Mi punto de inflexión fue conocer a Fernando. Él corría en AVECO desde junior, yo le sacaba un año y conocía muchas cosas que yo desconocía y comenzamos a trotar y a obtener tiempos similares y... a picarnos.



Porque del pique sano, mejoras y mueres en el entreno que tienes la suerte de compartir para tirar de tu compañero y arañarle unos segundos al crono de esas series imposibles. De esa manera, marcas el calendario a fuego una fecha para (aunque tú no se lo digas ni él a tí) midas fuerzas en campo neutral con la misma distancia y semejantes armas.

Mejoré (y mejoramos) desde 2002 a 2005 como, seguramente, no lo hubiéramos hecho de no haber tenido el placer (o la desgracia) de estar juntos. Primero entramos en los 36', luego en los 35' y por fin en los ansiados 34' en diezmil, jalonados de 1 hora 20' en Media, 1h 18', 16'...

Siempre mirándonos de reojo pero sabiendo que sin su presencia todo aquello no sería posible. La única lástima fue no poder compartir entrenos regularmente en esas temporadas, de lo contrario estoy seguro que la mejora hubiera sido incluso mayor.



De hecho, estoy convencido que su estancamiento... vino con mi lesión. En nuestro último combate, San Silvestre Vallecana de 2005, hice 34'30'' y él 5'' más. Han tenido que trascurrir 4 años para que Fer batiera el mejor registro mutuo, los 34'20'' que hice en Canillejas 2004.

Ahora la pelota está en mi tejado, él ha hecho 33'53'' en Aranjuez y yo rozo los 40' en diezmil en 2009, 36'' más por kilómetro nos separan de poder volver a volar juntos, un mundo en el running.
Mucho ha llovido, y todavía me llama regularmente para saber "cuando voy a estar bien, y voy a poder entrenar con ellos, con el grupo de Rivas y hacer series con Esther Desviat..."
Yo le digo que en 2009 se va a cagar la perra pero que todo eso lo veo muy lejano, sin embargo, intentaré volver a cabrearle en las series, hacerle sufrir en las carreras y recogerle del suelo cuando finalicemos un diezmil.



Porque la competencia es sana y si no tienes un rival (amigo), debes buscarlo para mejorar.

1 comentario:

Barti dijo...

Buen chaval ese Fernando y mejor gente en Rivas :-)

Dario ya verás como en breve estás ahi dando guerra otra vez.