Una temporada muuuuy larga

A principios de agosto comenzaba mi temporada 2009-10, muchos deseos e intenciones en la mochila que afortunadamente han cumplido, y con creces, mis mejores sueños de una noche de verano (ya tendré tiempo de repasar lo acontecido durantes estos meses, eso sí)

Hoy, a finales de mayo, ya me pesan las piernas como el plomo de tantos meses de actividad, concentración, carreras "importantes", controlar la alimentación y demás avatares de sufrido corredor.
El otro día en Albacete ya me costaba correr y esto es por la falta de costumbre.


Durante mis años buenos (2004-2006) empezaba la temporada fuerte y me lesionaba (aunque nunca gravemente, excepto la que me aparcó dos años y medio) a principios de año, por lo que encadenaba 6 meses de entrenar muy duro, muchas carreras y luego el letargo.

Este año, toco madera, no me he lesionado (y no es que lo desee) pero esto ha hecho que sean 10 meses de correr constante.
No me quejo pero no estoy acostumbrado, ni cuando corría en 34's en 10K o 1h16' en 1/2, ni ahora cuando todavía estoy un poco más lento que a esos ritmos.

Cuando te encuentras en buena forma es difícil marcar la raya hasta determinado mes y luego descansar, quieres correr todo y todavía piensas que puede haber "esa" carrera óptima que estabas buscando pero tengo claro que mis mejores prestaciones son siempre noviembre-diciembre (coincidiendo con el frío, el par de meses de entreno duro y tensión reciente, y ansia por sacar marcas fuera pronto) y febrero-marzo (cuando sacas a la luz todo lo atesorado desde verano)
Fuera de esas fechas, bufff, mantener y no perder. Como ahora me encuentro.

No carreras a la vista hasta la Carrera de Madrid en Junio.